

Cuando la luz de la luna ilumina los tejados de la gran ciudad, las antenas de televisión empiezan a vibrar bajo las ondas que iluminan los receptores. Es hora de que los gatos y los tomcats empiecen su sarabanda. Una cigüeña anidada en lo alto de una chimenea no aprecia el espectáculo que generosamente se le ofrece. El resultado es una serie de incidentes tan numerosos como inesperados, cuyo ritmo y movimiento están ambientados con música de jazz, mezclando los gags más prosaicos con abstracciones nacidas de la pluma del artista.